CIRUGÍA ORAL

La cirugía oral se realiza para resolver determinados problemas de la cavidad oral como extracción de piezas dentales, fenestraciones de dientes incluidas para poderlas colocar en su lugar en la boca posteriormente, plastia de frenillo, extirpación de quistes o pequeños tumores, implantes dentales o cirugía preprotésica (cirugía que se realiza para que la dentadura que se coloque quede mejor asentada).

El objetivo de la cirugía oral es sobre todo extraer piezas dentales incluidas o que estén causando dolor o infección. También para extirpar lesiones precancerosas o bien colocar implantes dentales.

Es necesario, por parte del paciente, advertir de sus posibles alergias medicamentosas, alteraciones de la coagulación, enfermedades cardiopulmonares o renales, marcapasos ...

Aún así, ya pesar de la adecuada elección de la técnica y su correcta realización, pueden presentarse efectos indeseables como dolor, hemorragia, infección local, hematoma, ... pero con el tratamiento adecuado se resuelve en unos días.

IMPLANTES DENTALS

El implante dental es un pequeño tornillo de titanio puro, material biocompatible con el cuerpo humano, que se coloca en el hueso maxilar superior o inferior con el fin de sustituir las raíces de las piezas dentales perdidas, funcionando como dientes naturales.

Actualmente perder una o varios dientes no es un problema, pues con los implantes dentales se consigue rehabilitar la función que realizaban los dientes originales de la forma más natural posible. Desde la sustitución de un diente hasta una dentadura completa.

Hoy en día la colocación de un implante es un procedimiento sencillo, seguro y fiable mediante una pequeña cirugía. No hay límite de edad para la colocación de implantes dentales, siempre que el crecimiento óseo de la persona haya terminado, pasada la adolescencia.

Las personas mayores son las que más se benefician de la colocación de implantes debido a los resultados estéticos que producen en ellos son más significativos.

Sustituir los dientes perdidos por implantes dentales le hará recuperar la sonrisa y le permitirá comer lo que quiera sin las limitaciones que tenía antes del tratamiento. Son prácticos como los dientes naturales. Siempre debemos tener en cuenta que los dientes naturales son las mejores, pero cuando ya no las tenemos o cuando ya no se pueden conservar los implantes son la mejor opción.

Un implante dental está compuesto de dos partes:

  • implante o tornillo de titanio que insertamos quirúrgicamente en el hueso
  • pilar de titanio o cerámica que se adapta al implante y sobre el que pondremos la corona de la nueva diente. También podemos insertar la corona directamente atornillada sobre el implante, dependiendo de cada caso.

Hoy en día también existe la posibilidad de colocar implantes de circonio (consiste en un tipo de cerámica), que se empezaron a comercializar en 2004. De todos modos, la primera opción serían los implantes de titanio, ya que hay numerosos estudios a largo plazo demostrando su óptimo resultado, pero en caso de alergia al titanio se podría valorar el circonio, teniendo en cuenta que no hay estudios a largo plazo.